Ya
sea por manipulación, por soborno o por cualquier otra cosa. No se
ha tratado ni se trata igual a un ciudadano cuya situación económica
es insostenible y que roba para poder alimentarse que a un ciudadano
cuya situación económica es muy buena y con mucho poder, que roba
por pura ambición.
Hay
muchos bancos que nos roban de manera descarada y que rara vez son
llevados a juicio, y que si lo son, terminan por desprenden de su
condena con enorme facilidad.
Esta
desigualdad no se da solo en un ámbito económico recientemente el
tribunal de Estrasburgo ha invalidado la doctrina Parot, que
favorecía el cumplimiento integro de las condenas, por lo que hay
casos de violaciones, agresiones, o asesinatos, que salen de prisión
tras cumplir de 10 a 20 años y que cuya condena era de cientos o
incluso miles de años.
Hay un blog de la exdirectora general de instituciones penitenciarias
Mercedes Gallizo en el que dice: “La
ley debe ser igual para todos. Si no fuese así, perdería su
legitimidad”, estoy totalmente de acuerdo, se esta perdiendo la
legitimidad, es decir, la aplicación de la ley de un modo equitativo y justo.
Ya
no es solo una cuestión de desigualdad judicial y de derechos, es
una cuestión de seguridad, si la ley no se aplica de manera justa y
objetiva, nuestra seguridad esta en peligro, los ciudadanos más
pacificos se sentiran indefensos y los más agresivos tenderan a
tomarse la justicia por su mano.
Abel Bracho 4ºB
No hay comentarios:
Publicar un comentario